Un postre sencillo de hacer y que desde niña me volvía loca!
Este postre es originario de Italia y suele estar muy presente en nuestras casas , cada familia tiene su propia receta con sus ingredientes añadidos y secretos personales.
La receta que os adjunto es la que suelo hacer siempre en casa, la que he adquirido de mi abuela que siempre ha preparado para mis primos y para mi.
Podéis añadirle lo que creáis necesario para obtener un resultado aún más espectacular para los gustos de cada uno.
Ingredientes:
200 gr Bizcochos de huevo
500 gr de queso Mascarpone italiano
6 huevos
150 gr de azúcar
3/4 de vaso de café (150 ml.)
100 gr de cacao puro en polvo (sin azúcar)
1 pizca de sal (claras)
Dificultad: Fácil
Tiempo: 30 min
El primer paso es hacer café para tener 3/4 de vaso, y lo dejamos enfriar. Seguidamente separamos las yemas de las claras, y éstas las reservamos en la nevera en un bol grande, donde luego las montaremos. Al estar frías se montarán con mayor facilidad.
Vertemos el azúcar sobre las yemas al mismo tiempo que vamos batiendo suavemente y continuamos hasta que quede bien mezclado. Incorporamos el queso Mascarpone y mezclamos bien hasta que nos quede una textura cremosa, sin grumos. (Para mejores resultados usad la batidora)
Colocamos uniformemente la primera capa de bizcochos en un recipiente y los mojamos por encima con el café.
Montamos las claras: en el bol que teníamos a enfriar, batimos las claras. No las montamos de todo, solo hasta el punto que veamos que nos quedan muy esponjosas. Ahora las añadimos a la crema que teníamos en el paso anterior.
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Colocamos la segunda capa de bizcochos y esta vez sí los empapamos bien con el café, para que resulten luego más esponjosos. Repetimos cubriendo la segunda capa con el resto de la mezcla.

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